Misionera en Jerusalén (Israel)
Cardenal-Arzobispo de Madrid
Muy querido por Dios y por nosotras:
He recibido su carta y vengo a agradecérsela. El interés que nos muestra es grande. Su carta la he leído varias veces, me ha emocionado y la he dado a leer a las hermanas españolas que viven entre nosotras y me lo han agradecido mucho.
Algunas de sus frases: "Jesús se entregó día a día..., de manera especial (clavado) en la cruz". Esta es la lección que nos corresponde y nuestra entrega con mucho amor, nos ayuda en todas nuestras ocupaciones.
Le damos muchas gracias, Señor Cardenal, todas nosotras de varias nacionalidades: francesas, italianas, inglesas, sirias, etc., han sabido la ayuda que Vd. nos ha comunicado. Sin poderle olvidar, me despido en el Señor. (3-05-2013)